viernes, 18 de abril de 2014

¿Batidora, Amasadora o Thermomix?

Ya estamos de vuelta. Qué bien sientan unos días de descanso para coger fuerzas.
Tengo un montón de proyectos en mente. Pero antes quería dedicarle un post a algo importante que muchos me preguntáis:
Para hacer cupcakes, galletas, glasa o tartas ¿Me tengo que comprar una amasadora o me puedo apañar con la batidora de barillas o la thermomix?

Por poder lo podemos hacer hasta a mano con unas barillas pero el resultado no será tan bueno y el dolor de brazo no será muy agradable.

La batidora de barillas puede ser una solución  para quien está empezando.
El inconveniente de estos aparatos es que no suelen tener mucha potencia para hacer las masas y cuando añadimos harina a la mezcla no pueden amasar y tendremos que terminar    de amasar con espátula o con las manos.
Sin embargo nos servirá para hacer la buttercream y la glasa sin problemas. 


La thermomix aunque hace masas para pizzas no es el aparato ideal para nuestros postres. No cuenta con barillas (la mariposa no es lo mismo) que son importantes para batir bien la mantequila con el azucar y los huevos. A demás a veces empieza a coger temperatura al estar el motor abajo y se calientan los ingredientes de nuestas masas y cremas cuando en realidad deberíamos preparlas a temperatura ambiente.
Si la tenemos en casa y no disponemos de una amasadora la podemos usar para amasar el harina. Asi que podemos combinar el uso de la batidora de barillas con la thermomix.
Aunque no es el mejor aparato para hacer galletas o cupcakes, se pueden hacer, pero para mi gusto el resultado final no será tan bueno como con una amasadora.
A demas la buttercream de los cupcakes será dificil de conseguir con este apatato.


Y por último tenemos las amasadoras que es el apatato ideal, mejor si son fijas con vaso para poder así ir echando los ingredientes de una manera más comoda y sin parar de batir.

Este es un modelo económico de la marca Bosch. Cuesta por internet alrededor de 60€.


Y esta es una de las famosas KitchenAid que son monísimas pero también suponen una inversión de 300-600 euros dependiendo del modelo.


Por lo tanto mi consejo personal es que, si nos queremos dar un capricho o nos queremos dedicar más en serio a la repostería, nos compremos una amasadora para nuestra comodidad y conseguir los mejores resultados.
Pero si en cambio lo que queremos es hacer galletas o cupcakes de vez en cuando, nos las podemos apañar con lo que tenemos en casa y no meter otro cacharro más en la cocina.


2 comentarios:

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  2. Hola Lucía
    Me alegra mucho que te haya gustado el post y que te haya servido de inspiración.
    Tu web está fenomenal, la tendré en cuenta para el futuro.
    Espero que te vaya bien, ya me contarás!
    Un saludo!

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