Galletas de mantequilla, a la segunda va la vencida!

Después del fracaso con los cupcakes me decidí a probar si había más suerte con las galletas de mantequilla para decorar (pero no me rindo con los cupcakes, volveré a intentarlo más adelante).
El primer intento no salió como esperaba... A pesar de que el sabor era bueno, las galletas perdieron su forma en el horno y era imposible decorarlas por sus irregularidades.

Por suerte, se lo comenté a las dueñas de la tienda donde compro todos los productos y me dieron algunos consejillos.
El truco está en, una vez hecha la masa, estirarla sobre un papel para hornear y con otro por encima y dejarlo ya con el grosor que queremos que tenga nuestra galleta. Después meterla en la nevera al menos 3 horas y luego ya podemos cortar con los moldes.

Este fue el resultado. Creo que para ser el segundo intento me quedaron genial!

Un consejo:
Con cosas como esta te das cuenta de que en la repostería importan todos los detalles.
Si te dicen que la mantequilla tiene que estar a temperatura ambiente no es por capricho, es necesario.
Las cantidades son muy importantes.
Los tiempos también lo son ( tiempo de horneado, tiempo de amasado, tiempo en la nevera...).
Y todos los pasos son esenciales para que la receta salga perfecta.
Es un proceso largo así que paciencia!

GALLETAS DE MANTEQUILLA:

Ingredientes para 24 galletas aproximadamente:

• 250g de mantequilla a temperatura ambiente
• 250g de azúcar glas
• 650g de harina
• un chorrito de leche
• un huevo talla L más una yema
• una cucharadita de extracto de vainilla

Con la batidora de varillas batir la mantequilla e ir añadiendo el azúcar glas tamizado. Batir durante un minuto. Añadir el huevo y batir hasta que esté incorporado. Hacer lo mismo con el extracto de vainilla.
Añadir el harina tamizado poco a poco y batir bien.
Por último agregamos el chorrito de leche, batimos y hacemos una bola con la masa.
La estiramos con el rodillo entre dos papeles de horno dejando un grosor aproximado de 0.5cm.
Guardamos en el nevera unas 3 horas.
Después de este tiempo ya podemos cortar nuestras galletas con los cortapastas y ponerlas en la bandeja del horno sobre un papel para hornear.
Introducir en el horno ya precalentado a 180 grados durante 10-12 minutos (hasta que veamos que los bordes se doran ligeramente).
Sacamos del horno y las dejamos unos 7 minutos en la bandeja caliente.
Tras este tiempo las pasamos a una rejilla para que se enfríen al menos tres horas.
Cuando estén completamente frías ya podemos decorarlas!
Mientras tanto la mejor manera de conservarlas es guardarlas en una caja de lata donde nos pueden durar hasta dos meses en perfecto estado.